“Lo único que les voy a decir que hay preguntas que me pueden hacer a mí, y hay preguntas que a lo mejor se las tienen que hacer a los dirigentes. Yo voy a estar a muerte acá, hasta el final. Sea lo que sea, el resultado que sea, el partido que viene y el que sea. Porque soy de esta casa, quiero a mi club, amo mi club, y hasta el final voy a estar acá. Después, si tienen otras preguntas, se la tendrán que hacer a otra gente, no a mí. Ésto solamente les quiero decir: hasta el final voy a estar acá, hasta el día que vengan y me saquen mi puesto. Pero hasta ese día, voy a estar acá”.
Dicho eso, se fue. Así fue la brevísima “conferencia de prensa” de un desencajado Raúl Sanzotti, entrenador de Argentinos Juniors, tras el 0-1 sufrido en Liniers.
Pocas veces se ha visto tan sacado o caliente a un DT. Aún menos a Sanzotti, un hombre de diálogo y frialdad para el análisis. Sin embargo, algo sucedió entre el pitido final y el momento en el que el ex arquero se acercó a la prensa. Los dirigentes, por su parte, negaron que haya ocurrido algún tipo de incidente o cruce verbal en el vestuario visitante del José Amalfitani.
Lo cierto es que Sanzotti se anticipó a las preguntas periodísticas e improvisó un monólogo de alrededor de 25 segundos. Su tono aumentó cuando enfáticamente pronunció las palabras “a muerte”. Como si algo lo hubiese molestado. Quizás sólo sea el resultado y la comprometidísima situación del Bicho con los promedios…
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