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 Falcioni arrugó, así lo dió a entender Anthony De Ávila jugador del América de Cali que erró el penal que le dio el título al Bicho. Por aquel entonces el jugador tenía 21 años y no estaba en la lista de los que iban a patear.
Como todos recuerdan, Argentinos Juniors se impuso en la definición por penales convirtiendo los 5 tiros que ejecutó, América de Cali convirtió 4, el restante, el penal en cuestión, lo atajó Vidalle.
En una nota publicada hoy en el diario “El País” de Colombia , el jugador declaró que el encargado de patear el penal era Falcioni y este arrugó.
Aquí el resumen de la nota.
Las crónicas de la época dicen que usted no era el encargado de patear, pero le tocó porque Falcioni, que era el elegido, se echó para atrás…
“Sí, a mí no me tocaba. Cuando Ochoa me dijo que pateara el quinto penal, yo acepté; pero en realidad hubo varios que practicaron los penales. No sé qué le pasó a Falcioni, de pronto vio una responsabilidad muy grande y por eso no lo tiró; me tocó a mí”.
¿Qué sensación tuvo en el momento de ir a patear el penal?
“Yo iba convencido de que lo iba a anotar; pero cuando fui en busca del balón, era lógico que sintiera algo de nerviosismo. Un penal de esa naturaleza en un partido tan crucial, que definía un título de Copa, no era fácil y más que era en otro estadio. Es normal el nerviosismo; además, yo tenía apenas como 21 años, muy joven para la época”.en 1985.
Con jugadores tan experimentados, y siendo usted el más joven del plantel, ¿por qué uno de los ‘grandes’ no fue a patear?
“Esa es una responsabilidad muy grande; por mucha edad que uno tenga y por más experiencia que haya, patear el quinto penal es muy bravo, más cuando toda una hinchada y todo un país esperan el desenlace de ese penal; es obvio sentir un poco de susto”.
¿Alguien le habló antes de patear?
“No recuerdo que alguien me haya dicho algo. Ni siquiera escuché lo que gritaba la hinchada de Argentinos”.
¿Al momento supo de la magnitud del penal que había errado?
“Claro, lo sabíamos todos en el equipo. No recuerdo que alguien me haya dicho que lo pateara duro; seguro lo hubiera hecho. Pero sucedió así”.
¿Qué pasó después?
“Por la cabeza pasan muchas cosas, a uno se le viene el mundo encima, vinieron muchas críticas, que por qué lo había errado; pero afortunadamente encontré personas que me apoyaron mucho. De parte de mis compañeros por lo menos no hubo reproches, ellos saben que yo no era el indicado”.
Fuente Diario “El Pais” de Colombia
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