Cuando uno iba llegando al polideportivo veía que no era una noche más. Cientos de autos poblaban las calles aledañas. Mucha seguridad en los alrededores y dentro del club le daban a los concurrentes la tranquilidad para que nada empañe lo que iba a ser una verdadera fiesta. Más de mil personas disfrutaron de una noche única. Las mesas de los quinchos, pobladas como nunca; las otras, ubicadas en el “barrio norte”, también. La familia de Argentinos Juniors estaba presente. Los pibes, y no tan pibes, hicieron una “guerra” de espumas en la “antesala” de la pista de baile, donde cientos de Bichos danzaban sin parar. El verde césped del solárium de la pileta fue el lugar elegido para el armado de la pista y del escenario principal, donde, pasada la medianoche, Ariel Prat nos deleitó con su repertorio de música murguera. La luna y su reflejo en el natatorio daban el marco ideal para una postal increíble. Al término de recital del músico popular, y luego de varios sorteos de indumentaria de Argentinos, llegaron “Los Mismos de Siempre”, el fantástico Murgón de La Paternal, que brindó un espectáculo maravilloso. Equilibristas, malabaristas, bailarines, y una percusión espectacular, hicieron delirar a toda la concurrencia. Luego fue el turno del concurso de bailes y los premios para los concursantes. Todo concluyó a la hora prevista. Eran las 3 de la mañana cuando la fiesta llegó a su fin. Las luces de colores se fueron apagando, la ambulancia contratada “por las dudas” se marchaba, por suerte sin trabajo, y los concurrentes salían en orden del Polideportivo “Las Malvinas”, predio que volvió a vivir una fiesta de esas de antaño. Esperando que ésta haya sido la primera de muchas otras, felicitamos a la “Subcomisión de Relaciones con las Instituciones Barriales y Asociaciones Civiles” del club por la organización del evento. |
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