 Lucas Rodríguez apareció en Primera División de repente, y luego de una lesión importante, con operación de por medio, desapareció. Pasó la recuperación pero nunca más fue tenido en cuenta, a pesar de no tener jugadores en su puesto. Sufrimos improvisando laterales, teniendo un jugador de Selección en ese sector. Se decía que “no estaba en condiciones todavía”, pero era convocado para jugar con la Sub 20; que “le falta juego”, pero jugaba y era designado capitán del equipo juvenil que salió campeón en L´Alcudia. Supongamos que tenían razón, que le faltaba fútbol, pero ¿era mucho menos que los jugadores que cubrieron su puesto? Atención, no decimos que eran malos jugadores, sino que eran centrales devenidos en laterales, y se notaba. Se queman jugadores improvisándolos en posiciones que les quedan incómodas. ¿Por qué no poner en ritmo, si es que no lo tenía, a un jugador de quien, cuando surgió, se decía que era una mezcla de Domenech y Mac Allister? “Fútbol y garra” eran las dos palabras que mejor lo definían. Ojalá que este 2013 sea el año de Lucas Rodríguez, un muy buen jugador y, además, fanático del Bicho. El nombre del club del cual es hincha cubre toda su espalda, y no se saca la remera, a pesar del calor, para que sus compañeros no piensen que es tribunero. El tatoo lo tiene hace mucho tiempo, ya que el pibe viene de familia hincha de Argentinos, vive en el barrio y, además, y por sobre todas las cosas, juega muy pero muy bien. Este verano lo veremos con la camiseta 14 de la Selección Argentina Sub 20; no hará la pretemporada con el plantel del Bicho, pero estará en forma, ya que entrena en Ezeiza para este sudamericano.
|
 |
 Donde está el Bicho está Argentinos Pasión 10 años juntos |
