A pesar de su buena actuación, una vez finalizado el encuentro Leonardo Sánchez se sintió culpable. No por un error que costara un gol del rival o un cabezazo que pudo ser el tanto de la victoria, sino por el golpe que le propinó a su compañero y capitán, Julio Barraza. “Vino Julio y no lo vi. Levanté la pierna y le pegué. Nos preocupamos todos en cancha, fue un susto para todos”, narró el propio defensor ,ex Instituto, que viene siendo titular los últimos tres partidos de Argentinos Juniors.
“Me comentaron que despertó camino al centro médico y que está fuera de peligro. Es una buena noticia para todos”, continuó diciendo preocupado el ex Estudiantes, que regresó a su ciudad natal y enfrentó al enemigo del club en el cual se formó este zaguero central, de 27 años, que llegó en el último mercado de pases. “Fue especial jugar en casa, aunque la gente de Gimnasia apenas se acordó de mi pasado en Estudiantes”, contó al respecto.
En cuanto al empate en cuestión, Sánchez analizó: “El partido fue trabado, Gimnasia se nos vino encima y, por suerte, supimos aguantar hasta el final”. Con este resultado, Argentinos alcanzó 24 unidades en el Torneo Final y se despidió de la mínima chance que había de pelear con los primeros equipos de la tabla. Sin embargo, el duro central rescató algo importante: “Seguimos sumando puntos para salir de la zona roja”.
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