Un equipo del montón

Sobran las palabras, Argentinos Juniors avergüenza a sus hinchas cuando sale de casa. Juega mal y pierde. El equipo no tiene vuelo, no tiene chispa, es apático y se desangra en el único recurso que su DT parece buscar.

El Bicho cayó por 1 a 0 frente a Godoy Cruz, uno de los dos peores equipos del campeonato, y volvió a dejar una imagen lastimera originada por la única idea que Pablo Guede parece querer transmitir en el conjunto cuando sale de La Paternal; pelotazos cruzados que en el mayor porcentaje de los casos son fácilmente bloqueados por los defensores rivales.

Pero los jugadores también hacen su parte cuando las tribunas no les exigen nada, parecen jugar a media máquina, se preocupan poco por la pelota y se comprometen menos por el equipo. En definitiva, el combo perfecto para el desastre que se repite cada quince dias.

Para colmo, Argentinos pierde incluso cuando los rivales hacen poco por ganar el partido. Como ocurrió esta tarde en Mendoza.

Es angustiante tener que tolerar encima que no haya autocrítica por parte de los responsables, DT y jugadores, cuando los números arrojan que fuera de casa, se recibieron más de una docena de goles en los últimos cinco partidos, que no se hizo un sólo gol y que en tres de ellos se recibieron expulsiones.

A esta altura de los acontecimientos, pareciera que los hinchas hacemos más por el equipo que los jugadores mismos. Si la derrota es en casa y en las tribunas hay silbidos, el plantel reacciona, se hieren los orgullos y en el siguiente encuentro se ve un vuelo distinto y un equipo superior en cuanto a rendimiento y entrega.

Pero afuera, donde no hay ojos propios que observen, pareciera que no hay enojos. No hay reclamos ante las expulsiones, el/los capitanes ven a los árbitros a no menos de 30 metros y ante la derrota, las cabezas bajas marchan al vestuario sin una sola voz que se escuche enardecida de bronca y partida de angustia como las de todos los hinchas que sufrimos frente a la televisión.

La situación es prácticamente irreversible, la respuesta ya no está en la semana. Argentinos traiciona su mejor forma de jugar, su estilo. El plantel no tiene una jerarquía propia que le permita revertir la situación en el corto plazo y Guede lleva casi 50 encuentros sin una buena seguidilla de al menos 5/6 encuentros consecutivos que justifiquen su continuidad como posible solución a este grave problema de funcionamiento. Es hora de buscar otro tipo de soluciones.

El mercado de pases está abierto y los contratos pueden romperse. Lo único que no se puede romper, es el amor de los hinchas por los colores y la camiseta. Los hinchas, que en definitiva son los que más sufren y que (para colmo) cuando se quejan porque que las cosas no funcionan, ven la espalda de que aquellos que deberían responder y que encima pretenden decirles cómo deben sentirse.

Sintesis:

Godoy Cruz (1): Franco Petroli, Lucas Arce, Pier Barrios, Facundo Butti, Martín Luciano, Bruno Leyes, Facundo Altamira, Vicente Poggi, Roberto Fernández, Daniel Barrea, Salomón Rodríguez

DT: Daniel Oldrá

Argentinos Juniors (2): Diego Rodríguez, Thiago Santamaría, Francisco Álvarez, Jonathan Galván, Román Vega, Juan Cardozo, Alan Lescano, Emiliano Viveros, José María Herrera, Nicolás Oroz y Maximiliano Romero.

DT: Pablo Guede

Gol: 46′ Rodriguez (penal)

Cambios: 55′ G. Moreyra ⇆ D. Barrea; 58′ F. MacAllister ⇆ J. Cardozo; 58′ G. Veron ⇆ J. Herrera; 58′ T. Molina ⇆ E. Viveros; 60′ G. Abrego ⇆ R. Fernandez; 76′ S. Montiel ⇆ T. Santamaria; 76′ L. Heredia ⇆ M. Romero; 79′ M. Pino ⇆ S. Rodriguez (Lesion); 79′ M. Mendoza ⇆ V. Poggi; 79′ L. Cingolani ⇆ F. Altamira;

Árbitro: Andres Gariano

Estadio: Malvinas Argentinas