Argentinos Juniors, de la mano de un Juan Ignacio Mercier superlativo, pudo reencontrarse durante todo el partido con el dominio de la pelota, jugando por momentos bien e intentando volver al camino en donde encontró mejores resultados. Del partido de esta tarde frente a River (llegaba como líder del torneo), se rescatan, a diferencia de los partidos anteriores, más puntos positivos que negativos. Estas mejorías hacen creer que el equipo de Troglio, de a poco, va encontrando su juego. En la previa ambos equipos llegaban necesitados: River precisaba los tres puntos para consolidarse como candidato y para seguir sumando en su lucha por escapar de los últimos puestos de la tabla del descenso, mientras que Argentinos buscaba reunirse nuevamente y de una vez por todas con el fútbol del Campeón. Y el balance para el Bicho, más allá de que sólo se obtuvo un punto, fue bueno. Porque pudieron revertirse errores; no hubo jugadas de expulsión, ni descontrol y nervios; de hecho, sólo Basualdo vio la tarjeta amarilla, pero porque también el achique, la presión y el sacrificio que se vieron contra Vélez se repitieron en el Diego Armando Maradona. Y porque cuando las piernas no respondían, de igual manera se intentó buscar el gol y los jugadores intentaron no replegarse contra Navarro. Un aspecto que no debe dejar de tenerse en cuenta fue la participación activa de Mauro Bogado y del chileno Hernández en el juego para asociarse en la salida con Mercier. Entre ambos, y por primera vez, no se notó tanto la ausencia de Néstor Ortigoza. Quizás el aspecto que debe considerarse ahora es la falta de definición, de efectividad en el ataque. Porque las situaciones de peligro que se crean no se concretan, ya sea porque a veces cuando hay que patear al arco, se busca el último pase, o porque simplemente un cabezazo “limpio” termina yéndose arriba del travesaño. No caben dudas y no es ninguna novedad, que de haber convertido alguna de las situaciones creadas, el equipo hubiera crecido aún más, recuperando la confianza perdida. El objetivo inmediato, ahora, es consolidar el juego que por momentos mostró Argentinos, y buscar convertir en el arco ajeno. Luego del partido de hoy, una victoria parece estar un poco más cerca.
La figura
Juan Ignacio Mercier
Lo bueno
– El dominio de la pelota y el intento de circulación de la misma, la búsqueda de jugar más por abajo y menos al pelotazo de las fechas pasadas. – El intento de Emilio Hernández por cubrir la posición de enganche, fundamental y tan necesitada en este equipo. – Que Escudero no fue amonestado y prácticamente no intentó llevarse la pierna de algún contrario de souvenir.
Lo malo
– La falta de definición en los últimos metros de la cancha – El cansancio acumulado, que ya se empieza a sentir.
Síntesis:
Argentinos Juniors: Nicolás Navarro; Gonzalo Prósperi, Miguel Torrén, Juan Sabia y Sergio Escudero; Juan Mercier, Germán Basualdo, Emilio Hernández (ST ’32 Fabio Escobar) y Mauro Bogado; Andrés Romero (ST ’22 Leandro Barrera) y Nicolás Blandi (ST ’39 Gonzalo Vargas). DT: Pedro Troglio. Suplentes: Luis Ojeda, Nicolás Berardo, Federico Domínguez y Franco Niell.
River: Juan Pablo Carrizo; Paulo Ferrari, Alexis Ferrero, Adalberto Román y Carlos Arano; Facundo Affranchino (ST ’12 Manuel Lanzini), Matías Almeyda y Roberto Pereyra (ST ’36 Rodrigo Rojas); Ariel Ortega; Diego Buonanotte (ST ’17 Mariano Pavone) y Rogelio Funes Mori. DT: Ángel Cappa. Suplentes: Mario Vega, Josepmir Ballón y Walter Acevedo.
Goles: No hubo.
Amonestados: PT ’32 Germán Basualdo (AJ) Expulsados: No hubo
Árbitro: Pablo Lunati Asistentes: Julio Ayala y Walter Velaz Estadio: Diego Armando Maradona (Argentinos Juniors).
|