Injusta despedida.

Operativos policiales ineficientes.  Después de un muy buen partido frente a Olimpo, Nico Navarro recibió insultos y agravios desde la tribuna, quizás, de los mismo “hinchas” que se llenaron la boca, cuando se fue al Napoli, diciendo que era el mejor arquero de la Argentina.
 Esos agravios, más las críticas feroces en los distintos foros, hicieron que Nico hablara con Pedro Troglio y adelantara su despedida del arco del Bicho.

 Lo ideal hubiese sido un partido despedida, no esta salida abrupta, Nico no lo merece.
Volvió al club con la mejor predisposición, alternó buenas y malas, más buenas que malas, pero quizás las malas fueron determinantes en partidos claves, y eso parece imperdonable.

 Ya es casi un hecho que el Kayserispor de Turquía será su próximo club, hay firmado un precontrato y sólo falta que el jugador viaje a realizarse la revisación médica.

 Luis Ojeda será el arquero titular de acá al final del torneo, y buscará terminar de convencer al DT de que no hace falta buscar un arquero titular en el próximo receso.

 Nico Navarro no merecía terminar así en el club que lo vio crecer, y al que le dejó mucho, no sólo económicamente.
 Una lástima. Toda la suerte para él, se lo merece.

Para Argentinos Pasión, Dario Vaccarini
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