El espectacular recibimiento que se le hizo al equipo indicaba que este no era un partido más, era el partido, no sólo lo entendió así el hincha, sino también los jugadores. El “vamos, vamos los pibes…” era la canción más escuchada y los pibes respondieron, escapada de Nagüel y Luquitas Rodríguez, con lo justo, la mandó adentro. Fiesta total en la parcialidad del Bicho, abrazos con extraños, lágrimas por doquier y gritos afónicos. Silencio en la popular local. En el segundo tiempo el resultado cambió, pero el aliento de la gente siguió siendo constante. “No me hablen del descenso, no me hablen de la B…” era el hit preferido para esta etapa, mientras que los Cuervos clamaban venganza por el 81, con banderas alusivas incluidas. Siguen sangrando por la herida, una herida que jamás va a cicatrizar. Terminó el partido y fue empate dentro del campo de juego, pero en la tribuna la victoria del Bicho fue más que clara. La gente respondió, no sólo en número, sino también alentando incansablemente. El hincha entendió que de ésta se sale todos unidos, vamos no nos quedemos. . |
![]() Donde está el Bicho está Argentinos Pasión El Sitio de Internet más antiguo del club, 10 años juntos |
,