La derrota ante Rosario Central dinamitó el ciclo de Ricardo Caruso Lombardi en Argentinos Juniors. El DT estaba furioso por todo y con todos, y presentó su renuncia a los dirigentes, que le pidieron que la reconsidere. Sin hablar con los jugadores, el Tano ni pasó por el vestuario en el final del partido, y así, dramáticamente, dio por finalizada su segunda etapa en el club.
Argentinos no ganaba desde hacía cuatro fechas, pero eso no era la noticia. La novedad pasaba por el entrenador, que se iba sin hablar. Caruso optó por el silencio, agachó la cabeza y se fue sin dedicar ni un minuto a los micrófonos, sus fieles amigos y replicadores de sus mensajes. Incluso, su propio cuerpo técnico se sorprendió de la actitud tomada por su cabecilla. ¿Qué pasó?
La bronca se apoderó del ahora ex DT del Bicho, que no toleró los insultos de la gente y los gritos contra él: “Andate Caruso”, se escuchó desde varios los sectores del Diego Armando Maradona. También quedó molesto por el penal de Sergio Víttor, pero la bronca fue con Carlos Maglio. En el entretiempo charló con el árbitro, y casi termina en una riña con el lungo referí.
Terminado el partido, Caruso no entró al vestuario. Ni saludó a sus jugadores, ni discutió, ni siquiera se despidió. Habló con las autoridades del club, oficialistas y opositores, y les manifestó su deseo de irse. Sorprendidos, le pidieron que no se vaya, que reconsidere su extrema decisión. Sin embargo, parece ser indeclinable. RCL deja Argentinos.
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