Ciudad Autónoma de Buenos Aires, algunas semanas atrás…
Se encuentran dos gerentes de una empresa, uno le dice al otro:
- Che, no sé qué pasó, pero hice que el jefe de ventas renuncie…
- ¿Cómo? – Preguntó exaltado el Gerente a cargo.
- Si, al parecer algo le molestó, que se yo – Respondió el segundo queriendo cambiar rápido de tema.
- La pu… madre, bueno. No pasa nada, vemos cómo seguimos…
Unos días después… El Gerente a cargo, luego de reunirse con posibles reemplazantes para el puesto vacante, anuncia a su equipo de trabajo:
- Creo que ya tengo al nuevo jefe de ventas. Viene con experiencia en otras tres empresas, tuvo bastantes buenos resultados, es un poco caro, pero creo que va a rendir bien.
- ¡Pará! – Lo frena alguien – Tengo un nuevo candidato…
- ¿Quién es?
- Un pibe joven, no tiene mucha experiencia, pero hablé con él y parece que se come el mundo.
- ¿Dónde laburó?
- Y… en la empresa donde se formó, con su familia.
- ¿Cómo le fue?
- Mal, Pero no sabés lo bien que habla, si te juntás con él, te convence.
- Pero… ¿cómo que le fue mal?
- Si, de hecho, no lo quieren ver de vuelta ni a 30 cuadras de distancia. Pero dale una chance, aparte es más barato y busca una revancha. Ya nos salió bien el experimento el año pasado.
- Si, pero no es la misma situación, el mercado en ese momento estaba relativamente accesible. El jefe de ventas nuevo había laburado como administrativo en las mejores empresas del mundo y además, teníamos a Méndez, a Juárez y a Kuyumchoglu, el pibe.
- Bueh, el mercado ahora no está tan bien, pero venimos con buenas ventas del semestre anterior, ¿qué es lo peor que puede pasar?
- Traelo…
Pasan dos semanas y la empresa no vendió nada… El gerente a cargo llama a una reunión extraordinaria en la empresa.
- Este flaco no vendió nada.
- Bueno, lo que pasa es que sus dos mejores vendedores justo se enfermaron.
- Pero hay como 10 más…
- Bueno, vos sabés que éstos 10 que trajimos no son lo que eran los otros 10 que se fueron…
- Esa respuesta ahora no me sirve, si no vendemos rápido, nos fundimos.
- Y… pero los vendedores que trajimos los aprobamos entre todos.
- No me sirve la respuesta ¿Ahora qué hacemos? Encima al jefe nuevo, para rajarlo, tenemos que poner un dineral.
- Tranquilo, es imposible que nos fundamos.
- Uh! – Exclamó un empleado que por ahí pasaba – Esto ya lo vivimos hace dos años jefe…
* Los personajes y hechos retratados en esta historia son completamente ficticios. Cualquier parecido con personas verdaderas, vivas o muertas, o con hechos reales, es pura coincidencia.