Argentinos Juniors fue derrotado nuevamente en su propio estadio, en esta oportunidad, cayó ante Lanús. El conjunto de Gabriel Milito, que venía vapuleado del Monumental, buscó superar este desafío con los ojos puestos en la semifinal de la Copa Argentina, pero apenas si logró mostrar una leve mejoría, básicamente dada por el cambio de actitud.
El diagnóstico es pesimista, el Bicho viene en caída libre desde hace varias fechas y tanto su juego como los resultados que obtiene, exponen su irregularidad. Anoche, para colmo, volvió a chocar de frente con su realidad. Buscó ser protagonista del encuentro, pero sus propias deficiencias y las virtudes del rival (más el sistemático bombeo del referí del encuentro), hicieron que la búsqueda sea infructuosa.
El equipo de Luis Zubeldía mostró porqué ocupa el segundo lugar de la tabla, limitó bien las transiciones de Argentinos, lo mantuvo lejos de su arquero y golpeó fuerte cada vez que tuvo la oportunidad. Tal vez la sensación, sobre todo para aquellos que concurrimos al estadio Diego Armando Maradona, es que el Bicho mereció más, pero en el golpe por golpe, en el frío análisis, el resultado fue justo. La actitud sin fútbol es sólo un cúmulo de buenas voluntades, que se destacan, pero son insuficientes.
Los contrapuntos son fuertes, el Bicho recibió 11 de los 19 goles en contra en las últimas 5 fechas y la contundencia ofensiva en el mismo período, se pudo ver sólo ante Colón. Las lesiones y los malos desempeños individuales, sumados a planteos que se contraponen cada 45 minutos hacen que, al momento del pitazo inicial de cada partido todos nos planteemos un enorme; “a ver qué pasa”.
El encuentro de anoche mostró ciertas mejorías en algunos aspectos y en algunos desempeños individuales; ¿serán suficientes?
Lo cierto es que el panorama es incierto y preocupante, todo Argentinos Juniors parece depender del encuentro del próximo miércoles, y eso está definitivamente mal. El técnico canceló la conferencia de prensa, el presidente, Cristian Malaspina, obvió el resultado, y con su tuit subrayó aún más la importancia del enfrentamiento con Boca.
Con esta perspectiva y frente a un rival que viene mejor que el Bicho y que es el “caballo del comisario”, las esperanzas parecen quedar en el orden de lo místico. En el amor propio que los jugadores puedan tener y en la ayuda divina que muchas veces nos ha salvado. Crucemos los dedos, que los protagonistas nos hacen creer que después del miércoles, no hay nada…
* En el póker, es la jugada en la que uno arriesga todo su capital en una mano.
Mirá el resumen del partido:
SÍNTESIS:
Argentinos Juniors (0): Federico Lanzillotta; Kevin Mac Allister, Pablo Minnisale, Carlos Quintana y Elias Gómez, Matías Romero y Jonathan Gómez (2ºT 32′ Diego Sosa); Luciano Gómez (2ºT 21′ Javier Cabrera), Gabriel Florentín y Mateo Coronel (2ºT 08′ Nicolás Reniero); Gabriel Ávalos.
DT: Gabriel Milito.
Suplentes: Leandro Finochietto, Román Vega, Marco Di Césare, Franco Moyano, Leonel Mosevich, Lucas Villalba, Emanuel Herrera y Enzo Kalinski.
Lanús (1): Lautaro Morales; Braian Aguirre, Guillermo Burdisso, Diego Braghieri (2ºT 21′ Matías Pérez) y Alexander Berenabei; Lautaro Acosta (2ºT 18′ Ángel González), Matias Esquivel (2ºT 18′ Facundo Pérez), Jorge Morel y Victor Malcorra (2ºT 36′ Pedro De la Vega); José López (2ºT 36′ Tomás Belmonte) y José Sand.
DT: Luis Zubeldía.
Suplentes: Lucas Acosta, Franco Orozco, Julián Aude, Nicolás Morgantini, Nicolás Thaller, Agustín Rodriguez, Leonel Di Plácido.
Gol: 1ºT 34′ Lautaro Acosta (L).
Amonestados: 1ºT 40′ Lautaro Acosta (L), y 47′ Matías Esquivel (L). 2ºT 30′ Javier Cabrera (AJ), 31′ Matías Pérez (L), 42′ Gabriel Florentín (AJ), y 47′ Diego Sosa (AJ).
Expulsados: No hubo.
Árbitro: Pablo Dóvalo.
Asistentes: Lucas Germanotta (1º) y Iván Núñez (2º).
4º Árbitro: Mauro Biasutto.
Estadio: Diego Armando Maradona, de Argentinos Juniors.