 El 28 de Septiembre de 1964 nacía en el Oeste de la Ciudad de Buenos Aires (en Castelar) un pequeño llamado Claudio Daniel Borghi. Siendo un niño decidió, como muchos, empezar a jugar a la pelota; pero él no era como muchos. El club que le abrió las puertas y le permitió crecer como futbolista y persona, fue Argentinos Juniors. Y claro que no era como muchos; no sólo aprovechó la oportunidad, sino que se convirtió en ídolo del club, habiendo ganado todo con Argentinos (Metropolitano del 84, Campeón Nacional del 85, Copa Libertadores del 85 y Copa Interamericana del 86, como jugador; y Torneo Clausura 2010, como técnico). En el marco de su cumpleaños número 51, el Bichi habló con Argentinos Pasión Martes (Radio Doppler). Muchísimos fueron los mensajes de los hinchas saludándolo por tal motivo. Las redes sociales se “coparon” de fotos del Bichi acompañadas de los mejores deseos. Y no faltaron las directas declaraciones de amor para con su persona. “Siento mucho orgullo y se me complica un poco esta situación, porque soy bastante sensible. Yo no tengo Twitter, pero me hicieron una copia de lo que ponía la gente y me lo mandaron. Es muy lindo. Me pone muy feliz y contento y lo agradezco muchísimo”, respondió humildemente. Además ejemplificó esta muestra de afecto con la anécdota del mensaje de un chico que lo sorprendió. El sms decía “que no me conocía y nunca me había visto personalmente, y que no sabía por qué me quería tanto”, reveló. Durante la entrevista se tocaron muchísimos temas. Si hay una voz autorizada para hablar de Argentinos Juniors, ese es Borghi. El que le dio al club todos los títulos que cosechó. Pero, quizá aún más importante, es una persona que se involucra y que quiere en demasía al club. Resumiendo un poco, algunos de los tópicos fueron:
El Bicho no fue ni es un club más en la carrera del Bichi. El Bichi no fue ni es un jugador ni DT más en las historia del Bicho. La unión es intrínseca, pase lo que pase. “Argentinos es un lugar donde pasé muchos años de mi vida. Tengo amigos y enemigos. Se extraña mucho. El agradecimiento mío y de mi familia va a ser eterno. Nunca vamos a poder devolver todo lo que nos dio. Es una relación casi familiar. Por eso siempre estoy en contacto y atento a lo que sucede en el club”, sostuvo el ex jugador. Pero, como toda relación familiar, están los momentos buenos y los malos. Su última etapa como DT fue, quizás, la más dura; se fue dolido y de verdad, porque así siente al Bicho: “Cuando creíamos que teníamos que volver era muy complicado salvarse del descenso, y la gente tiene menos paciencia que nosotros. Los insultos nos duelen más a los de adentro que a los de afuera”, recordó. Sin embargo, sus recuerdos son mayormente felices. “En una época tuve la entrada prohibida a Argentinos por problemas con directivos de ese momento. Tuve mucho miedo cuando volví, el día de la inauguración del estadio. Pero pude ver que el cariño de la gente seguía estando siempre presente”, confesó abiertamente. Y, además, agregó una situación muy graciosa, de ‘entrecasa’, para que nos demos cuenta que el Bicho está presente hasta en el momento más cotidiano de su vida: “El otro día me cargaba mi mujer porque tenía un pantalón de Argentinos y me dijo, ¿qué, querés volver a jugar? Y yo le dije que lo usaba de pijama”. Redondeando, las relaciones tan intensas y de amor son así; él lo sabe y por eso la gratitud que muestra constantemente para con los hinchas y el club de La Paternal.
Con respecto al momento del Bicho en la actualidad, respecto del campeonato dijo: “Opinar no me corresponde, no es bueno ni grato que lo haga. Lo sigo bastante. El otro día lo vi con Racing, también con Boca. Argentinos está ahí, no con muy buenos resultados pero estoy esperando que mejore, como siempre, y que tenga un buen campeonato”, sostuvo respetuosamente el ex DT.
Además se le preguntó por la lesión de Ezequiel Ham, a quien conoce mucho y supo dirigir: “Hablé con el Turco, le mandé un gran cariño y él me mandó un gran cariño por mi cumpleaños. Quedamos en vernos cuando vaya a Buenos Aires, me debe un asado. Espero que se recupere pronto. Hablé con José (Artese) antes y después de la operación. Va a estar duro y va a ser largo, pero la juventud tiene fortaleza y va salir adelante”.
Y hubo tiempo para más… Imposible no hablar de Riquelme y Ledesma, referentes y experimentados “cracks” del Semillero. El primero, como se sabe, ya no juega profesionalmente desde que se retiró con la camiseta del Bicho, y el segundo, ya cerca de su retiro, es el alma y Capitán de Argentinos. “El retiro de Román fue extraño para mí, creo que podría haber seguido un poco más. Empezó en un club y terminó en el mismo; fue el momento adecuado, pero tengo la ilusión de verlo jugar un poco más. Esto es como el buen vino, con los años mejora un poco”. Y agregó: “Román cumplió su palabra, junto con otros jugadores, de volver al club y defenderlo; eso me llena de orgullo, respeto y admiración”, reflexionó sobre el 10. Ya refiriéndose al actual Capitán, dijo: “El Lobo es un gran jugador, tiene una facilidad extraordinaria para jugar. Lo que Argentinos tiene que aprovechar más es lo que él puede enseñar. Es un maestro sin saberlo. Todavía tiene muchas ganas, corre como el más joven. Es un orgullo tener un jugador con esa calidad en Argentina”, reconoció otro jugador que también supo, y sabe, llenarnos de orgullo, al igual que el Lobo lo hace ahora.
“Actualmente no estoy en el mundo del fútbol ni salgo en las noticias; los mensajes de cariño me alegraron muchísimo”. Alejado un poco del ambiente futbolístico, nos contó el porqué de esto: “El momento en Argentinos (la última etapa) fue bajo mucha presión, subí mucho de peso en ese momento. Hice un pacto familiar, por cuestiones de salud. Bajé de peso y me estoy cuidando”. Ofertas hay pero… son ‘complejas’. Se habla de China, Arabia Saudita, pero soy muy dependiente de mi familia, y el irse significa perder muchas cosas que no se justificarían por algo económico. En Chile es difícil que trabaje, he tocado el techo más alto con la Selección”. ¿Y Argentina? “Argentina depende de qué club sea. Además, es una situación difícil porque no se sabe por cuánto tiempo puedo estar, si es un año, dos años, cinco meses, es muy complejo acá”, reflexionó. Finalizando la entrevista, volvió a reconocer las muestras de afecto: “Quiero agradecer las muestras de cariño de la gente, no creo merecer tanto. Creo que las cosas que pienso y predico las aprendí en el club”, concluyó. Veremos qué le depara el destino al Bichi Borghi. Mientras tanto sabemos que está atento y que se interesa por el club. Y, como siempre, esperamos que vuelva a casa cuando quiera. . |
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