Christian Toni, Presidente de Estudiantes de Mérida, reconoce que Venezuela está atravesando un momento de gran complejidad política, económica y social, pero que en Mérida la situación no es crítica. “Aquí se está más tranquilo, estamos lejos de todo”, le comentó a Argentinos Pasión.
No es la primera vez que la política y la realidad de un país interfieren en un partido de fútbol. El martes pasado a la mañana, Juan Guaidó, el presidente de la Asamblea Nacional Venezolana, convocó a un levantamiento en contra del gobierno de Nicolás Maduro. Millones de personas en todo el país salieron a las calles en protesta. En ese país, estaba Argentinos Juniors para jugar la Copa Sudamericana.
Sin embargo, Toni aseguró que el partido podría haberse jugado. “El 1º, 2 y 3 de mayo hubo juegos de la Primera División venezolana en distintas ciudades del país, con total normalidad”, declaró el dirigente.
AP- ¿Qué te pareció la medida de suspender el partido?
“La decisión de Conmebol para mí fue apresurada. Pero los entiendo, si desde hace un mes les están mandando solicitudes para cambiar la sede, como comentaron los directivos de Argentinos; quizás la Conmebol estaba un poco predispuesta a suspender. Además les mandaban fotos de protestas supuestamente violentas. Si eran tan violentas, ¿por qué parte de la comitiva de Argentinos salió del hotel sin seguridad y caminó tranquilamente por distintos sitios de Mérida?, ¿por qué se tomaron fotos con los manifestantes? Ellos estuvieron en la ciudad. ¿Dónde estuvo lo violento?”
¿Pudiste comunicarte con dirigentes de Argentinos mientras estaban en Venezuela?
“Hablé con el presidente. Le dije que espere, que considere bien la situación, pero no hubo manera. En primer lugar, le comenté que, si de verdad quería jugar el partido, se tranquilizara para analizar todo fríamente. Luego, que se tranquilizara para salir del país correctamente, porque en un momento de desesperación se pueden tomar malas decisiones. De hecho, la tripulación de la línea aérea de charter que contrataron no tuvo el descanso que debe tener por ley. El partido se pudo haber jugado. El presidente pudo haber esperado, respirado, y ahorrarle este ida y vuelta a sus jugadores”.
¿Por qué descartan en Estudiantes la posibilidad de que se juegue en un terreno neutral?
“Si las condiciones en el país no estuvieran dadas para jugarlo, nosotros seríamos los primeros que solicitaríamos jugar afuera. Pero las condiciones sí están dadas. Ellos estuvieron en el país. Aparte, se desarrollan otros partidos de Primera División con normalidad. Me parece que estuvo mal llevada la situación. Además en Mérida no ocurrieron manifestaciones violentas”.
¿Entonces la seguridad del plantel de Argentinos estaba garantizada?
“Siempre lo estuvo, tanto por organismos del gobierno como por organismos privados, incluso por la seguridad del equipo. Ellos dicen que no se les garantizó la seguridad para salir a entrenar a primera hora, pero eso es falso, porque ellos mismos cambiaron el entrenamiento para la tarde porque llegaron al hotel a la medianoche. Me pareció fuera de lugar que un dirigente diga que se les negó la seguridad para entrenar a primera hora, cuando fueron ellos los que decidieron entrenar a la tarde”.
¿La semana que viene entonces no va a haber problemas con la seguridad?
“Por supuesto que no. El martes tuvieron la seguridad a disposición, desdee l momento que llegaron al aeropuerto El Vigía; al día siguiente estuvieron todo el tiempo tranquilos. Incluso parte de su delegación salió del hotel sin seguridad, a caminar por la ciudad, y no les pasó nada; hasta se tomaron fotos con la gente. No entiendo cuáles son los alegatos de violencia o falta de seguridad”.
¿Cómo tomaste los comentarios de los dirigentes de Argentinos sobre el mal trato que recibieron por parte de ustedes?
“Me sorprendieron. Me parecieron fuera de lugar. Yo como Presidente me apersoné al hotel donde estaba Argentinos Juniors porque el Presidente no quería comunicarse conmigo telefónicamente. Le invité a hablar y a que tomáramos las cosas con calma. Él, en todo momento, decía cosas fuera de lugar y descontroladas, que creo no eran acordes a un dirigente de este tipo de investiduras”.
¿Vos sentiste que no se quería jugar el partido por los conflictos?
“Si. Pero no lo explicaban de esa forma. Siempre su respuesta era “no quiero jugar y me voy”. Hubiera sido muy sensato de su parte decir gentilmente: “Consideramos que no se puede jugar dado todo lo que está pasando”, pero de manera calmada. Nosotros le pedíamos que no diga solamente que no quería jugar, sino que se basara en circunstancias reales para tomar esa decisión. Quizás se desesperó por la situación”.
¿Cómo te imaginas los días previos al partido, si Argentinos viaja a Mérida nuevamente?
“Quiero dejar en claro que la seguridad está garantizada, como lo estuvo en todo momento. Ya hicimos la gestiones para autorizar su vuelo chárter, yo he hecho todas las diligencias necesarias para la seguridad. Los organismos privados y públicos se la van a garantizar. Acá se está viviendo una gran fiesta; la ciudad esperaba con ansias el partido. De hecho, cuando se estaban yendo, la gente pensaba que iban a entrenar”.
La realidad es que no parece haber indicios de que la conflictividad y la inestabilidad socio-política en Venezuela desaparezcan de una semana a la otra. Sin embargo, Toni confía en que el partido se podrá jugar. “Si se suspende de nuevo por algo especial, no me compete tomar la decisión de qué sucederá, pero te garantizo que las condiciones van a estar dadas”.