Gabriel Milito no se presentaba a las habituales conferencias de prensa post partido desde hace cinco fechas. Más precisamente desde la derrota con Atlético de Tucumán. Pero en esta ocasión rompió el silencio y él mismo convocó a los medios que seguimos la campaña de Argentinos Juniors a una charla íntima en donde se habló de todo.
Argentinos Pasión no podía estar ausente de esta convocatoria y hacia el Bajo Flores partieron nuestros cronistas para intentar ser, una vez más, los portadores de las inquietudes de las y los hinchas del Tifón de Boyacá.
En la charla de más de una hora de duración Milito analizó, no solo el empate alcanzado en la última fecha ante el Huracán de Diego Dabove, sino los pormenores de otros enfrentamientos para así poder ilustrar, en una suerte de balance anticipado, lo que fue esta temporada que va llegando a su fin, ponderando el hecho de haber clasificado a la Copa Conmebol Sudamericana a tres fechas de la finalización del presente torneo.
En un debate intenso con los allí presentes, no eludió ningún ítem y respondió a la requisitoria de temas tan sensibles como los préstamos de Mateo Coronel o de Lucas “Pochi” Chaves, el rendimiento individual de jugadores como Federico Redondo o Alan Rodríguez y el desmantelamiento sufrido en el medio campo en virtud del poco habitual, por lo prolongado, mercado de pases de este año.
Un párrafo destacado de la charla fue el capítulo dedicado a la derrota como local ante Platense: “En el clásico, toda la responsabilidad la tengo yo…yo me mandé la cagada”, reconoció enfáticamente.
El título de esta nota seguramente llamará la atención de amantes y detractores del actual DT de Argentinos. Según la frase aludida en la misma se podría interpretar que Milito estaría decidido a culminar el contrato que lo vincula por un año más al club de La Paternal. Sin embargo, deja entrever que eso dependerá de los objetivos que se tracen para el 2023 apostando así a intentar superar lo logrado hasta ahora.
Para ello dejó claro que deberá planificar el futuro con los dirigentes y con la Secretaría Técnica en procura de lograr un salto de calidad.
Nunca es intrascendente la palabra del técnico de Argentinos y ésta no fue la excepción.
Mirá esta interesantísima charla:
