El mayor de los hermanos Mac Allister viene siendo una de las piezas fundamentales en el engranaje del Argentinos Juniors dirigido por Diego Dabove. Al sacrificio y la marca que venía teniendo el semestre anterior, ahora le sumó inteligencia táctica para moverse dentro del campo, y su principal fuerte en Inferiores, que es la precisión en los pases para iniciar jugadas, incluso llegando al área rival y convirtiendo como lo hizo frente a Arsenal.
Finalizado el partido con Independiente, donde otra vez tuvo una actuación destacable, nos contó sus sensaciones luego del triunfo: “Sabíamos que veníamos a enfrentar a un rival muy difícil, que si bien no está en su mejor momento, siempre hay que tenerle cuidado. Nosotros veníamos a hacer nuestro trabajo, sabíamos que con humildad y compromiso lo íbamos a sacar adelante, y así fue”.
Hubo una jugada clave donde el árbitro Lamolina decidió expulsar a Andrés Roa luego de una infracción a Francis, y quisimos saber si considera que la decisión del referí fue acertada: “Si, fue para roja, porque me metió un planchazo y hasta me dejó la rodilla marcada. Si me ves la pierna, todavía tengo los tres tapones marcados”.
Luego de dicha expulsión Argentinos Juniors se fue al entretiempo con un hombre de más y la posibilidad aprovechar esta ventaja para la segunda parte. Al respecto le preguntamos a Francis cuál fue la charla que tuvieron en el vestuario: “Dijimos que teníamos que empezar a tener un poco más de tenencia, porque estábamos errando muchos pases, incluso los fáciles. Teníamos que lograr esa precisión, y una vez que lográramos eso íbamos a encontrar los espacios, sobre todo sabiendo que ellos estaban con 10. Además pensamos que, quizás, era un buen momento para aprovechar la desesperación de la gente. Por suerte sobre el final logramos ponernos en ventaja y llevarnos los 3 puntos”.
El chicaneo familiar con sus dos hermanos (Kevin y Alexis), que ahora están en Boca, es habitual en el grupo de Whatsapp de la familia, y obviamente no queríamos quedarnos afuera de esa intimidad, así que le consultamos a Francis si hubo algún mensaje finalizado el partido. Con una sonrisa de oreja a oreja, nos respondió: “Ayer no hubo mensajes porque ellos estaban calientes (Boca perdió ante Racing). Además, nunca hay que hablar antes de tiempo; por las dudas, hay que abrir el paraguas. Pero ahora sí, les mandé una selfie en el vestuario y les puse: “¡No se caguen, putos!, jaja”.
Por último, Argentinos Juniors tiene 11 días de preparación para enfrentar a su próximo rival, el miércoles 30 de octubre a las 15 horas en el DAM; le preguntamos a Francis como piensan encarar lo que viene, y nos decía: “Hay que seguir así, no cambiar mucho, no relajarnos, no volvernos locos por vernos ahí arriba. Ahora se nos va un campeonato de 41 puntos y hay que prestar atención a eso; sobre todo, buscar una estabilidad para el club”.